En este programa la hna Paqui Morales SHM nos narra como el Señor le enseñó la lección de no dar ningún alma por perdida a través de un hombre anciano y enfermo que en primera estancia se cerraba a la gracia de Dios e impedía las oraciones delante de él y rechazaba todo lo que viniese de Dios, pero por la perseverancia de las misioneras que iban cada domingo a su casa a rezar la coronilla de la Divina Misericordia, se abrió a la gracia de Dios y murió confortado con los sacramentos.