Hoy celebramos la fiesta del Inmaculado Corazón de María. Esta fiesta está íntimamente vinculada con la del Sagrado Corazón de Jesús. Los Sagrados Corazones de Jesús y de María son inseparables, están maravillosamente unidos en el tiempo y la eternidad desde el momento de la Encarnación. Por eso, sus fiestas se celebran en días contiguos, viernes y sábado respectivamente, en la semana siguiente al domingo del Corpus Christi. La Iglesia nos enseña que el modo más rápido y seguro para llegar a Jesús es por medio de María. Por eso nos consagramos al Corazón de Jesús por medio del Corazón de María.