Nació en Sevilla el 30 de enero de 1846. Desde muy pequeña tuvo que abandonar la escuela para trabajar como obrera en un taller de zapatería. En su experiencia de oración vio una cruz vacía frente a la de Cristo crucificado y recibió la inspiración de inmolarse junto a Él por la salvación de las almas. En 1875 dio comienzo el Instituto de Hermanas de la Compañía de la Cruz que se distinguiría por el servicio a Dios en los hermanos más pobres “haciéndose pobre con el pobre para llevarlo a Cristo”. Murió en Sevilla a los 86 años el 2 de marzo de 1932. Fue canonizada por el Papa Juan Pablo II el 4 de mayo de 2003.