Cuando Arnaldo creció, su madre, la reina, le puso tres condiciones que tendría que tener la chica con la que debería casarse para ser aceptada por ella. Tuvo que viajar lejos para encontrar una mujer de su agrado, y aunque no reunía las condiciones necesarias, estaba dispuesta a aprender. La boda se celebró poco después. ¿Cómo lo consiguió? ¿Y por qué había el día de la boda tres viejecitas en la mesa principal? ¡Descúbrelo!