«La Eucaristía expuesta es el faro del mundo», y por supuesto, también lo es para el evangelizador. En el último episodio de este bloque de «El mundo que se avecina» titulado «Misioneros digitales», Albert Cortina pide a Carla Restoy Barrero, conferenciante y comunicadora católica, que comparta de dónde saca la fuerza para vivir como cristiana y evangelizadora. Una cuestión fundamental es reconocer que somos hijos de Dios y que Dios nos ama profundamente. Esto lleva a buscar al Señor para poder conocerle y amarle más, y como el amor no deja indiferente provoca el hecho de querer comunicarlo a todo el mundo. Por ello en la vida del misionero, y del misionero digital, no pueden faltar los elementos esenciales de la adoración y misa diaria, el esfuerzo por formarse más sobre la verdades de la fe y el deseo de convertir la vida en una oración constante.