Pedro Arranz comenzó a alejarse del Señor en su adolescencia, pero es en el periodo universitario cuando acaba de quitar a Dios de su vida. Sumergido en el mundo del alcohol, de las fiestas y las drogas, Pedro comienza un exitoso proyecto profesional en el que todo le va muy bien. Sin embargo, fracasa a nivel sentimental. Ese desastre sentimental consigue derrumbarlo. Le abruma el miedo a la soledad. En todo esto, se cruza en su vida una invitación para ir a un retiro de Emaús. Allí Pedro descubrió cuánto le quiere Dios, que es un elegido suyo y que no está solo. Descubre su historia en «Cambio de Agujas».