¿QUÉ DICE DIOS DE LA IMPORTANCIA DE MI CUERPO?1.DIOS ESPERA QUE YO CUIDE MI CUERPO.“Todo me está permitido, pero no todo es para mí bien. Todo me está permitido", pero no dejaré que nada me domine. Los alimentos son para el estómago y el estómago para los alimentos; así es, y Dios los destruirá a ambos.” 1 Corintios 6:12-13a (NVI) 2.MI CUERPO ES PROPIEDAD DE DIOS. “Pero el cuerpo no es para la inmoralidad sexual sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.” 1 Corintios 6:13b (NVI...
¿QUÉ DICE DIOS DE LA IMPORTANCIA DE MI CUERPO?
1.DIOS ESPERA QUE YO CUIDE MI CUERPO.
“Todo me está permitido, pero no todo es para mí bien. Todo me está permitido", pero no dejaré que nada me domine. Los alimentos son para el estómago y el estómago para los alimentos; así es, y Dios los destruirá a ambos.” 1 Corintios 6:12-13a (NVI)
2.MI CUERPO ES PROPIEDAD DE DIOS.
“Pero el cuerpo no es para la inmoralidad sexual sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.” 1 Corintios 6:13b (NVI)
3.MI CUERPO SERÁ RESUCITADO DESPUÉS DE MI MUERTE.
“Con su poder Dios resucitó al Señor, y nos resucitará también a nosotros.” 1 Corintios 6:14 (NVI)
Errores que cometemos
•Usamos la fuerza de voluntad en lugar del poder de Dios.
•Tenemos la motivación equivocada.
•Tratamos de cambiar por nuestra cuenta.
4.MI CUERPO ESTÁ CONECTADO CON EL CUERPO DE CRISTO.
“¿No saben que sus cuerpos son miembros de Cristo mismo? Huyan de la inmoralidad sexual. Todos los demás pecados que una persona comete quedan fuera de su cuerpo; pero el que comete inmoralidades sexuales peca contra su propio cuerpo.” 1 Corintios 6:15a ,18 (NVI)
5.EL ESPÍRITU SANTO VIVE EN MI CUERPO.
“¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios?” 1 Corintios 6:19 (NVI)
6.JESUS COMPRO MI CUERPO EN LA CRUZ.
“…fueron comprados por un precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios.” 1 Corintios 6:20 (NVI)
“Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.” Romanos 12:1 (NVI)
RECETA DE DIOS PARA LA SALUD
“Señor, tú hiciste mi cuerpo; dame ahora inteligencia para entender tus leyes” Salmos 119:73 (BAD)
“Estas leyes no son solo palabras, son tu vida: por la obediencia de ellas podrán vivir vidas largas y prósperas en la tierra." Deuteronomio 32:47 (NVI)
“Hijo mío, no te olvides de mis *enseñanzas; más bien, guarda en tu *corazón mis mandamientos. Porque prolongarán tu vida muchos años y te traerán prosperidad. Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas. No seas sabio en tu propia opinión; más bien, teme al Señor y huye del mal. Esto infundirá salud a tu cuerpo y fortalecerá tu ser. Honra al Señor con tus riquezas y con los primeros frutos de tus cosechas. Así tus graneros se llenarán a reventar…” Proverbios 3:1-10 (NVI)
1.Confiar en Dios ES BUENO PARA MI SALUD
“Dios mío tú has sido bueno conmigo; ya puedo dormir tranquilo.” Salmos 116:7 (TLA)
“La mente tranquila es vida para el cuerpo, pero la envidia corroe hasta los huesos.” Proverbios 14:30 (DHH)
2.Confesar mi pecado ES BUENO PARA MI SALUD
“Mientras no te confesé mi pecado, las fuerzas se me fueron acabando de tanto llorar… Pero te confesé mi pecado, y no oculté mi maldad. Me decidí a reconocer que había sido rebelde contigo, y tú, mi Dios, me perdonaste.” Salmos 32:3,5 (TLA)
3.Dar Generosamente ES BUENO PARA MI SALUD
“El que es generoso prospera; el que reanima será reanimado.” Proverbios 11:25 (NVI)
4.La diversión ES BUENA PARA MI SALUD
“No hay mejor medicina que tener pensamientos alegres. Cuando se pierde el ánimo, todo el cuerpo se enferma.” Proverbios17:22 (TLA)
Después de estas cosas había una fiesta de los judíos, y subió Jesús a Jerusalén. Y hay en Jerusalén, cerca de la puerta de las ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda, el cual tiene cinco pórticos. En éstos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos, que esperaban el movimiento del agua. Porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque, y agitaba el agua; y el que primero descendía al estanque después del movimiento del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviese. Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano? .Juan 5:1-6
