Nació en Venecia en 1625, en el seno de una familia noble, rica y reconocida en la ciudad. Recibió una sólida formación religiosa e intelectual. A los veinte años fue escogido como acompañante del embajador Luigi Contarini, al famoso Congreso de Münster. Fue ordenado sacerdote en 1655 y más tarde obispo. En sus visitas pastorales se alojaba en casas humildes y comía con ellos, como uno más. Fundó la Congregación de los Oblatos de los Santos Prodóscimo y Antonio, en Padua. Murió en 1697.