El P. Rodrigo Miranda, IVE, hace una reflexión sobre un hecho que le ocurrió en la parroquia de Alepo cuando, debido a la guerra, no tenían luz eléctrica. Para poder continuar con cierta normalidad las actividades de la parroquia, mientras un sacerdote oficiaba el rosario, la misa…, el otro hacía guardia en la puerta. Un día, mientras el Padre rezaba los misterios luminosos, el Señor le “iluminó”. ¡Escucha este audio de «Una persecución luminosa» y aprende cómo, en los momentos más difíciles, se agudiza el ingenio!