En esta ocasión, el santo relata tres sueños que tuvo entre los años 1873 y 1875. En el primero de ellos S. Juan Bosco cuenta cómo un obispo que hasta entonces había sido su colaborador, comenzó a causarle problemas. A continuación explica cómo recibió al archiduque Carlos y le cuenta cómo debería proceder para poder ser coronado, cosa que nunca ocurrió. Por último, revela cómo descubrió que tenía que empezar el seminario de vocaciones tardías.