D. Antonio Izquierdo, licenciado en Teología, avanza en la historia de Israel describiendo los 430 años que este pueblo permaneció en Egipto.
Durante mucho tiempo la relación con los faraones fue buena, pero, pasados 400 años, el pueblo había crecido mucho y el faraón reinante comenzó a ver a esas tribus llegadas hacía siglos como una posible amenaza para él. Por eso, comienza una política de opresión hacia el pueblo de Israel. Unidos por una misma fe en el Dios de Abrahán, Isaac y Jacob, los israelitas claman a Dios para que los libere de sus opresores. Y la mano potente de Dios intervino convirtiéndolos en un pueblo libre.
Dios se sirve de personas concretas para intervenir en la historia y, en este importante capítulo del pueblo de Israel, eligió a un hombre llamado Moisés.