¿Libertad de expresión? ¿Para qué? ¿Para quién? Ante una sociedad que quiere hacer callar a los cristianos, es necesario que, más que nunca, hablemos a tiempo y a destiempo, es decir, que no podemos dejar de predicar la verdad siempre y en todo lugar, y la verdad es Cristo. Esto es lo que dice D. Jorge González Guadalix, en «Reflexiones de un cura».