El mayor problema de un
héroe de ficción es que tarda en darse cuenta que pelear sólo, contra el
crimen organizado, es una tarea muy agotadora y difícil.
En la vida real, Satanás sabe que una de las formas más sencillas de hacernos caer es tendiéndonos la trampa de la soledad.
Con Jesús, no estás solo, nunca más. Descúbrelo, en Sidekick!