Nació cerca de Barcelona, España, hacia el año 1189. A los 15 años quedó huérfano de padre, y dueño de grandes posesiones. Estando en edad de casarse hizo una peregrinación a la Virgen de Monserrat y allí se puso a pensar que las vanidades del mundo pasan muy pronto y no dejan sino insatisfacción y que por el contrario lo que se hace para la vida eterna dura para siempre. Entonces prometió a la Virgen mantenerse casto y se le ocurrió una idea que iba a ser de gran provecho para muchas gentes. Fundó la Comunidad de Padres Mercedarios.