Vivamos cada día sabiendo que el Señor nos espera en el cielo, que tiene una morada preparada para nosotros; y para conseguirlo, el P. Christopher Hartley, en esta homilía de «Palabras de vida desde la misión», explica que tenemos que ser iluminados por la verdad del Corazón de Cristo, sin miedo a lo que pueda pedirnos y con ánimo pronto y alegre para hacer su voluntad.