La fe sin obras es muerta, la verdadera fe es acción. Si creemos que Jesús es el Señor no solo debemos invocar su nombre sino poner nuestra vida en sintonía con su voluntad revelada en su Palabra. Jamás se debe entender esto como causa de nuestra salvación sino como fruto, como resultado, como evidencia de que nos hemos convertido a Dios de todo corazón.
Create your
podcast in
minutes
It is Free